Tocoa, Colón – En las primeras horas de la madrugada de hoy, un operativo policial en el departamento de Colón, en la región caribeña de Honduras, resultó en varios heridos, vehículos dañados y personas capturadas.
Los enfrentamientos ocurrieron durante una protesta en contra de la prohibición de armas, donde los pobladores denunciaron una respuesta violenta por parte de las fuerzas de seguridad.
Según los manifestantes, el desalojo fue particularmente agresivo, dejando a su paso una serie de incidentes que incluyeron destrucción de vehículos y personas detenidas.
Los ciudadanos advirtieron que las manifestaciones no cesarán y se extenderán a lo largo del día en varios municipios de la región, hasta obtener una respuesta satisfactoria de las autoridades.
Por otro lado, la policía defendió su intervención argumentando que algunos manifestantes hicieron uso de armas de fuego, lo que obligó a las fuerzas de seguridad a proceder con el desalojo para evitar una escalada violenta que pudiera terminar en tragedias.
El general Miguel Pérez Suazo, encargado del operativo, señaló que, pese a la intensidad del enfrentamiento, no hubo policías heridos.
Pérez Suazo también informó que se ha movilizado un contingente de 200 policías adicionales para impedir que los manifestantes vuelvan a tomar las carreteras, acción que, según él, afecta gravemente la economía del país.
“La policía no lleva armas de fuego para evitar situaciones fuera de control, pero la población estaba armada, lo que complicó el desalojo en algunas áreas”, explicó el general.
A pesar de las tensiones, el alto mando policial afirmó que se deben escuchar todas las voces implicadas en el conflicto. “Hay un grupo que está en contra de la prohibición y exige su derogación, pero también es importante considerar la opinión de las iglesias y otros sectores de la población”, añadió.
Los habitantes de Colón reiteraron su compromiso de continuar con las protestas hasta que las autoridades les brinden una solución concreta a sus demandas.