Las víctimas fueron identificadas como Carlos Eduardo Espinal, Marcos Antonio Reyes, Henry Leonel Villatoro y Diego Alejandro Velásquez. Las personas que resultaron heridas aún no han sido identificadas públicamente.
Familiares que se encontraban en Medicina Forense en Tegucigalpa informaron que una de las víctimas mortales, era un exmiembro de las Fuerzas Armadas de Honduras, que recientemente había renunciado, sin especificar la identidad del joven.
Según información de las autoridades, extraños detonaron 50 impactos de bala a sujetos que se encontraban dentro de un vehículo estacionado frente a una pulpería de dicha colonia.
Tras la balacera, dos jóvenes murieron al instante y los otros cuatro fueron llevados de inmediato a un centro asistencial, donde horas más tarde dos más perecieron por las perforaciones de bala.
Vecinos dijeron a las autoridades que cuando escucharon la balacera pensaron que se trataba de pirotecnia, sin embargo, minutos después escucharon los gritos y notaron que algo malo había ocurrido.
También manifestaron que en el lugar donde ocurrió la masacre hay cámaras de seguridad, por lo que las autoridades tienen ese elemento para la investigación.