De acuerdo con un reporte del portal New York Post, el presunto atacante de origen mexicano rendía culto a la Santa Muerte en el interior de su casa en el condado de Montgomery, Texas, Estados Unidos.
Así lo reveló al New York Post una fuente policial que tuvo acceso el altar, pues luego de la captura de Oropesa el pasado 2 de mayo, se realizó una requisa en su casa, donde se encontraron velas prendidas en una especie de altar.
Según detalló la fuente, en el altar habían estatuas de santos patronos, varios billetes de 2 dólares, flores de papel y aluminio conteniendo supuesta droga, lo que habría sido una especie de ofrenda para que la Santa Muerte protegiera a Oropesa.
El día de la captura del mexicano de 38 años, sospechoso de cometer la masacre contra cinco hondureños en el condado de San Jacinto, Texas, se conoció que en su residencia habían dos velas encendidas en el altar.
Su devoción a la santa muerte habría sido por costumbres mexicanas. De hecho, uno de los tatuajes que tiene Oropesa en su brazo es de la Santa Muerte. Ahí se ve la figura esquelética envuelta en túnicas y agarrando una hoz.
“Cualquiera que tenga un santuario de Santa Muerte está relacionado con el bajo mundo criminal“, dijo a medios locales el capitán retirado del Departamento de Seguridad Pública de Texas, Jaeson Jones, quien trabajó durante años en inteligencia para luchar contra los cárteles de la droga de México.
La masacre
El mexicano Francisco Oropesa enfrenta cargos de asesinato por ser el supuesto culpable de matar a cinco hondureños durante la noche del viernes 28 de abril.
Los cinco hondureños, incluyendo un menor de 9 años, corresponden a los nombres de Sonia Argentina Guzmán (25 años), Daniel Lazo (9 años), Diana Velásquez Alvarado (21 años), Obdulia Molina Rivera (29) y José Jonathan Cáceres (18).
Según las informaciones y testimonios de los familiares sobrevivientes, ellos fallecieron a manos de Oropesa, que era su vecino y estaba haciendo disparos al aire antes de la tragedia con un rifle AR-15.
Las autoridades de la zona dieron captura a Francisco Oropesa el martes 2 de mayo, luego de buscarlo incansablemente, una operación involucró a más de 250 agentes.
De acuerdo a lo informado, el mexicano tiene un panorama legal complejo, pues el hombre de 38 años enfrenta cinco cargos de asesinato en primer grado y podría someterse a una condena de homicidio capital (pena de muerte), esto en cumplimiento con las leyes de Texas.