
Estados Unidos – El Gobierno de Estados Unidos anunció un operativo especial en la frontera sur con México, orientado a detener a personas que no cuenten con un estatus migratorio legal y que planeen trasladarse voluntariamente hacia México durante las festividades de Navidad y Año Nuevo.
La información, difundida por medios estadounidenses, señala que la estrategia incluirá inspecciones en autobuses comerciales y otros medios de transporte por parte del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) y la Oficina de Protección Fronteriza (CBP).
De acuerdo con un memorando interno del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) citado por The Huffington Post, el operativo diferenciará a los migrantes con antecedentes criminales de aquellos sin historial delictivo.
Mientras que los primeros podrían enfrentar detención y procedimientos de deportación formal, los segundos recibirán un trato distinto, sugiriendo un enfoque menos punitivo pero con vigilancia constante.
Un portavoz del DHS indicó a que no se ofrecen comentarios sobre operativos futuros, aunque aseguró que “es de sentido común conocer quién entra y quién sale del país”.
Además, enfatizó que la administración busca mantener la seguridad fronteriza y los puertos de entrada bajo control riguroso, asegurando que ningún migrante indocumentado ingrese o salga de Estados Unidos sin la inspección correspondiente.
Incentivos para la salida voluntaria
Dentro de la estrategia, la Administración de Donald Trump ha impulsado el concepto de “auto-deportación” o salida voluntaria para migrantes sin estatus legal.
A través de la aplicación móvil CBP Home, los migrantes pueden acceder a un pago de hasta 1.000 dólares si deciden regresar voluntariamente. Según DHS, “si no te auto-deportas, no es una cuestión de si ICE va a encontrarte o no, sino cuándo”.
Aunque el Gobierno no ha publicado cifras oficiales, la revista The Atlantic informó que aproximadamente 35.000 migrantes han utilizado la aplicación hasta la fecha.
Esta medida forma parte de la política de Trump de intensificar el control migratorio y reducir la entrada irregular de personas al país.
Comparativa de deportaciones
Durante el primer año de la presidencia de Trump, se registraron cerca de 600.000 deportaciones, un número inferior a las 685.000 reportadas en el año fiscal 2024 bajo la administración de Joe Biden.
La política migratoria de Trump se ha centrado en reforzar la frontera, incentivar la salida voluntaria y aplicar medidas estrictas a quienes poseen antecedentes criminales.
El operativo navideño refleja la estrategia del Gobierno estadounidense de mantener la frontera sur bajo vigilancia intensiva, garantizando que los desplazamientos migratorios se realicen bajo la regulación federal, mientras se busca evitar incidentes durante las festividades y se promueve la cooperación voluntaria de los migrantes.


