La Ceiba, Honduras
La Fiscalía Local de Puerto lempira, logró la detención judicial contra tres policías preventivos, acusados de capturar a un hombre de la comunidad misquita, a quien pretendían sacarle información sobre un supuesto dinero extraviado.
Los acusados son los policías Chemo Tinglas Thomas, Erick Gabriel Amaya Pakistán y Ostavin Martínez Rosales, por los supuestos delitos de torturas agravadas en perjuicio de Dalios Damacio Jacobo.
También, se impuso la detención contra la policía Hogla Eunice Ávila Ariza por presunto delito de encubrimiento en perjuicio de la administración de justicia. Se señaló audiencia inicial para el día 21 de mayo del año 2024.
Según testimonio de la víctima y el trabajo de investigación coordinado por la Fiscalía, el martes 23 de abril de 2024, los policías se acercaron a Dalios y le preguntaron por un dinero que se le había extraviado a una señora que él asegura que no conoce.
Los policías lo capturaron y lo trasladaron hasta la posta ubicada en la comunidad de Yahurabila, donde lo sometieron con aros de presión en sus manos y pies, los cuales apretaron tan fuerte que le causaron heridas.
Después comenzaron a golpearlo, le arrancaron uñas de los dedos de las manos y de los pies, usando un cartucho de sus armas de fuego y un martillo. La víctima asegura que trataba de gritar para pedir auxilio, pero le taparon la boca con un trapo que ataron alrededor de la cara, por lo que nadie pudo escuchar sus gritos.
Según el relato del ofendido, los policías lo torturaron durante tres días consecutivos. Con un palo le golpeaban la cabeza, los aros de presión los ajustaron tanto que les lesionaron sus manos, y con un hierro hirviente con la letra R, se lo colocaban en el abdomen y en el pecho como si fuese un animal.
Según el testimonio de la víctima, los policías le decían que lo hacían (marcarlo con hierro), “porque adonde él fuera, lo iban a encontrar y que de ellos no se iba escapar”.
Al parecer, a una señora de la comunidad de Ujumbila, se le extravió un dinero que los policías decían que él había sustraído; sin embargo, Dalios no es de ese lugar, tenía pocos días de haber llegado y no conocía a las personas.
El día jueves 25 de abril de 2024, llegó la policía Hogla Eunice Ávila Ariza y cuando observó que sus compañeros tenían encerrado y amarrado a Dalios, les dijo que lo dejaran en libertad.
Fue entonces que los policías lo dejaron libre, sin embargo la policía Hogla no reportó la situación a sus superiores, tampoco anotó ninguna novedad al respecto tratando de ocultar lo ocurrido y ayudando así a que sus compañeros pudieran eludir su responsabilidad.
Los agentes de policía, lo dejaron en libertad con la advertencia que se fuera para su comunidad, porque si lo encontraban en Puerto Lempira, lo iban a asesinar.
Cuando por fin estuvo en libertad, Dalios acudió a las oficinas del Comité Nacional de Derechos Humanos (CONADEH) y luego le brindaron acompañamiento ante el Ministerio Público de Puerto Lempira para que formalizara la denuncia contra los policías agresores.