Nueva York, Estados Unidos
En la noche de ayer, el jurado se encontraba en plena deliberación sobre el veredicto en el caso del expresidente Juan Orlando Hernández.
Este enfrenta acusaciones de conspiración para introducir drogas a los Estados Unidos y posesión y tráfico de armas.
Tras las argumentaciones de la defensa y la fiscalía, el juez Kevin Castel instruyó a los 12 miembros del jurado para que prepararan su decisión.
Aunque no hay un tiempo estimado para el veredicto, se espera que sea anunciado hoy a partir de las 9:00 de la mañana, hora de Nueva York.
La sala se vio abarrotada por decenas de hondureños, algunos provenientes de otros estados, anticipando el veredicto que se creía se conocería la noche anterior.
Juan Orlando Hernández se enfrenta a tres cargos, incluyendo conspiración para introducir cocaína a los Estados Unidos, y la pena potencial varía desde cadena perpetua más 30 años hasta 10 a 30 años, a ser determinada por el juez en una fecha posterior.
La suerte del expresidente, quien gobernó durante ocho años, queda ahora en manos de 12 personas comunes y desconocidas de Nueva York, quienes decidirán su culpabilidad o inocencia.
Cualquier desacuerdo en el veredicto podría llevar a un nuevo juicio o a la absolución del acusado, según explicaron los expertos.
En la última jornada del juicio, el expresidente respondió a las preguntas de la fiscalía sobre las actividades de su hermano en el narcotráfico, negando cualquier vinculación. El fiscal buscó conectar a Hernández con el narcotráfico a través de su hermano, mientras que el expresidente se mantuvo firme en su posición.
El juez, Kevin Castel, ha sido objeto de críticas por su manejo del juicio, incluyendo la aceptación de numerosas objeciones de la fiscalía y restricciones a la defensa.
Las conclusiones finales de la fiscalía sugirieron que Hernández no persiguió el crimen y protegió a mafiosos a cambio de mantenerse en el poder, presentándolo como un narcotraficante político.
Por otro lado, la defensa argumentó que la verdadera conspiración era entre narcotraficantes que buscaban capturar a Hernández.
El jurado ahora tiene la responsabilidad de llegar a un veredicto que determinará el destino del exmandatario hondureño.