Nueva York, Estados Unidos
La Fiscalía se prepara para presentar más testigos clave en el juicio contra el expresidente Juan Orlando Hernández, quien será trasladado este lunes desde la cárcel de Brooklyn hasta la Corte de Nueva York, en Manhattan, para continuar con el proceso judicial.
El juicio se reanudará hoy con el contrainterrogatorio del exdetective de la Dirección de Lucha Contra el Narcotráfico (DLCN), conocido como Miguel Reynoso, será parte fundamental del juicio. Reynoso realizó la inspección a tres vehículos durante el arresto del capo Magdaleno Meza, donde se encontraron las ocho “narcolibretas” que implican a JOH en el recibimiento de grandes sumas de dinero del narcotráfico.
Durante el operativo, se hallaron armas de grueso calibre, más de 193,000 dólares en efectivo, documentos notariales, radios de comunicación y otros elementos. Las “narcolibretas” fueron entregadas por Reynoso a la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York, siendo la base para condenas previas.
El contrainterrogatorio estará a cargo de Renato Stabile, parte de la defensa de JOH, seguido por nuevas interrogaciones por parte de la Fiscalía.
Más testigos de la fiscalía
Entre los próximos testigos destacan capos del narcotráfico como Devis Leonel Rivera Maradiaga, líder del cartel de Los Cachiros, Víctor Hugo Díaz Morales alias “El Rojo”, Fabio Lobo (hijo del expresidente Porfirio Lobo Sosa), y el narco guatemalteco Fernando Chang Monroy.
“El Cachiro” testificará sobre sobornos a JOH, Manuel Zelaya y Porfirio Lobo, además de confesar conspiraciones para asesinar a varias personas. “El Rojo” afirmará haber financiado la campaña de JOH y Porfirio Lobo, buscando conexiones y protección para el tráfico de drogas. Chang Monroy declarará haber comprado grandes cantidades de cocaína a “Tony” Hernández, hermano de JOH.
También, se espera el testimonio del expolicía Mario Guillermo Mejía Vargas, quien admitirá haber traficado drogas mientras estaba en la Policía Nacional. Sin embargo, el testigo estrella será Fabio Lobo, hijo del expresidente Lobo Sosa, condenado a 24 años de prisión y con reducción de condena por colaboración.
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