
Washington, Estados Unidos – La administración del presidente Donald Trump no oculta su satisfacción por el incremento de arrestos a migrantes realizado por el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE), y asegura que sus políticas están “eliminando criminales de las calles”.
Sin embargo, los métodos utilizados y las condiciones de detención han generado un fuerte rechazo por parte de organizaciones civiles.
Un comunicado emitido por la Casa Blanca este martes señala que los operativos del ICE se han intensificado en al menos una decena de estados. En Carolina del Sur, por ejemplo, las detenciones se triplicaron en comparación con años anteriores.
En estados como Virginia, el aumento ha sido del 470 %, mientras que en Nevada se reporta un crecimiento del 300 %. Florida y California también destacan con alzas del 219 % y 123 %, respectivamente.
Las autoridades federales aseguran que más del 40 % de los detenidos ya han sido condenados o enfrentan cargos criminales.
Sin embargo, el lenguaje utilizado en el documento ha sido duramente criticado por sectores que defienden los derechos de los migrantes, ya que los equipara con violadores, asesinos y pandilleros.
Redadas encubiertas y protestas ciudadanas
Grupos de derechos humanos denuncian que muchas de estas detenciones se realizan sin órdenes judiciales y con tácticas intimidatorias. Los agentes del ICE suelen operar vestidos de civil, en vehículos no identificados y sin anunciar su presencia como autoridades.
En ciudades como Los Ángeles, Nueva York y Miami, las protestas contra las redadas se han intensificado. “No es solo una cacería de personas, es una estrategia de terror”, denunció un vocero de la Coalición de Inmigración de Nueva York (NYIC), quien también reveló un video grabado en las instalaciones del ICE donde se muestra a migrantes hacinados y durmiendo en el suelo.
Condiciones insalubres y denuncias de abuso
El informe más reciente de Human Rights Watch y otras organizaciones civiles documenta que, tras el regreso de Trump a la Casa Blanca, el número de personas detenidas en Florida aumentó un 111 %.
Esto ha generado una grave crisis de hacinamiento en los centros de detención y, según las denuncias, ya se han registrado dos muertes bajo custodia.
En Nueva York, legisladores locales han pedido una investigación urgente por las “condiciones insalubres y degradantes” en las que se encuentran muchos detenidos en el edificio federal del ICE.
Una política que divide
Mientras el Gobierno federal insiste en que los arrestos masivos son necesarios para garantizar la seguridad nacional, organizaciones sociales y expertos legales advierten que muchas de las personas detenidas no representan ninguna amenaza.
“La criminalización de la migración y el trato inhumano a los migrantes no solo es ilegal, también es inmoral”, afirmó este miércoles una representante de Amnistía Internacional en Estados Unidos.