Más de 1.3 millones de personas carecen de agua potable en Honduras, un país altamente vulnerable a la crisis climática.
En algunas zonas de Honduras, el coste del barril del preciado líquido oscila entre 40 y 60 lempiras (entre 1,62 y 2,44 dólares), un monto que en muchas ocasiones no pueden pagar las familias en Honduras, donde más del 70 % de la población vive en pobreza.
Algunas de las consecuencias son: el cambio climático, racionamientos y el crecimiento poblacional.