Francia
El PSG se despidió de la temporada con una nueva Copa de Francia, lograda con un triunfo 2-1 ante el Lyon, marcando la decimoquinta copa del club y la cuarta para Kylian Mbappé.
Este título se añade a la rica historia del club parisino, especialmente desde la adquisición por parte de los inversores cataríes.
El partido, jugado a un ritmo frenético bajo la dirección de Luis Enrique, mostró a un PSG dominante pero sin necesidad de brillar intensamente.
Los goles llegaron gracias a los errores defensivos del Lyon, aprovechados por Dembélé en el minuto 22 y Fabián Ruiz en el 34. Aunque el Lyon intentó una remontada con un gol de cabeza del irlandés Jake O’Brian al inicio de la segunda mitad, no lograron poner en aprietos a los parisinos.
Mbappé, en su posible último partido con el PSG, no tuvo una actuación destacada. A pesar de ser el máximo goleador del club con 256 goles en 308 partidos, no pudo marcar en esta final. Dejó algunos destellos de su talento, pero se marchó de vacío, algo inusual en su carrera.
El PSG cerró la temporada con los tres títulos nacionales: Liga, Copa y Supercopa. Aunque estos logros nacionales son significativos, no compensan la decepción europea, pero sirven como base para la primera temporada de Luis Enrique.
Esta final también destaca la paradoja del PSG: un equipo dinámico e intenso, pero sin el brillo esperado en Europa. A pesar de su dominio, se toparon con un inspirado portero brasileño Perri, quien realizó múltiples paradas decisivas. Sin embargo, los goles de Dembélé y Fabián Ruiz fueron suficientes para asegurar el título.
El Lyon, que ha experimentado una notable mejora bajo el entrenador Pierre Sage y con la inversión del propietario estadounidense John Textor, mostró espíritu pero no pudo superar al PSG. Su renacimiento les llevó a la sexta plaza en la liga, pero la final fue una prueba demasiado dura.
La despedida de Mbappé deja un sabor agridulce entre los aficionados parisinos. Aunque han disfrutado de uno de los mejores jugadores del mundo, lamentan su partida sin haber prolongado su compromiso con su ciudad natal.
La trayectoria de Mbappé en el PSG ha sido extraordinaria, dejando un legado de catorce títulos, pero también una sensación de lo que podría haber sido en Europa.
Con esta victoria, el PSG se despide de la temporada y de uno de sus mayores talentos, abriendo un nuevo capítulo en su búsqueda de la gloria europea.
