Tegucigalpa, Honduras
El diputado Jorge Cálix del Partido Libertad y Refundación (Libre), arremetió contra el pacto político forjado por las cúpulas de las tres principales agrupaciones partidarias en el Congreso Nacional, que culminó con la elección de las nuevas autoridades del Ministerio Público (MP), el Tribunal Superior de Cuentas (TSC) y otras instancias de segundo grado.
Cálix expresó su pesar por la falta de transparencia en el proceso y de manera irónica señaló que esta vez no se tacha de traidor a quien lideró el pacto, a diferencia de experiencias anteriores.
Recordó que cuando logró un acuerdo con liberales y nacionalistas para asumir la presidencia del Congreso Nacional, fue etiquetado como traidor. Sin embargo, criticó que ahora, a pesar del pacto gestado por las tres principales fuerzas parlamentarias, no se aplicara la misma condena.
El diputado lamentó la aplicación de diferentes estándares en la elección del fiscal general, señalando que su compañero Jari Dixon vio denegada su postulación, mientras que a Johel Zelaya, bajo circunstancias similares, no se tuvieron en cuenta sus restricciones y fue elegido fiscal general.
Cálix, miembro de Libre pero en oposición al liderazgo del partido, expresó su disgusto por la elección realizada en una sola boleta, lo que le impidió votar por individuos que, en su opinión, merecían el respaldo.
Calificó lo sucedido como otra “cachurecada”, haciendo referencia a las críticas que Libre formulaba a las acciones del partido Nacional cuando controlaba el Congreso Nacional y que ahora, según Cálix, se repiten.
El congresista denunció amenazas recibidas por su posición y afirmó que se le advirtió que, de no respaldar la votación, enfrentaría requerimientos fiscales por parte del Ministerio Público.
Finalmente, señaló que el acuerdo fue concebido por las cúpulas partidarias y fuera del ámbito del Congreso Nacional.
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