El canciller de Honduras, Eduardo Enrique Reina, informó que en los próximos días serán repatriados los cuerpos de los cinco hondureños que fueron asesinados el pasado 28 de abril al interior de una vivienda en Texas, Estados Unidos.
Reina indicó que se ha se instruido al consulado de Honduras en Houston, para que entre en contacto con las autoridades estadounidenses a fin de dar seguimiento a las investigaciones sobre el traslado de los cuerpos.
“Adicionalmente se entró en contacto con los familiares y el primero de mayo se sostuvo una reunión entre el vicecónsul y los parientes de las víctimas para que ellos pudieran firmar el documento de autorización para la repatriación de los féretros”, dijo Reina al ser consultado por medios nacionales.
El funcionario hondureño indicó que Estados Unidos cuenta con un programa de apoyo a víctimas de hechos criminales en territorio norteamericano, y por esta vía se buscaría la ayuda para repatriar a los connacionales.
Sobre los menores que han quedado huérfanos en esta tragedia, el funcionario hondureño comentó que la situación es compleja porque uno de los pequeños tiene la nacionalidad estadounidense.
“Estamos trabajando con ellos de la mano. Próximamente tendremos datos más concretos de las decisiones que se tomen”, expuso el canciller.
Tragedia en Texas
Cinco hondureños, incluido un niño de 9 años, murieron el pasado 28 de abril en un tiroteo en una vivienda en el condado de San Jacinto, Texas, a unos 90 kilómetros de Houston.
El autor del tiroteo identificado como Francisco Oropesa se dio a la fuga, pero fue capturado días después por las autoridades locales.
De acuerdo a testimonios de los sobrevivientes, Francisco Oropesa estaba disparando cerca de la vivienda de los catrachos por lo que uno de ellos le solicitó que dejara de hacerlo, sin embargo, el mexicano se molestó e ingresó con arma en mano a la residencia.
El hombre de 38 años mató a Sonia Argentina Guzmán (25 años), Daniel Lazo (9), Diana Velásquez Alvarado (21 ), Obdulia Molina Rivera (29) y José Jonathan Cáceres (18).
Los otros once hondureños que estaban en la vivienda lograron sobrevivir y Oropesa se dio a la fuga; fue hasta el 2 de mayo que el hombre fue capturado y ahora es acusado por el delito de asesinato.