Tegucigalpa, Honduras
El empresario hotelero Edgar Gavarrete ha presentado una denuncia pública alegando extorsión por parte de la Oficina Administradora de Bienes Incautados (OABI) en San Pedro Sula, Cortés.
Según Gavarrete, se le habría solicitado una “coima” de más de 1.5 millones de lempiras para permitir la operación continua de su hotel, Plaza Palmera, ubicado en el centro de la ciudad.
Gavarrete adquirió los derechos del hotel sin incidentes hasta marzo del año pasado, cuando surgieron complicaciones.
Según su relato, la Comisión Interventora, representada por el abogado Rigoberto Portillo (exinterventor de la OABI), el abogado Jaime Banegas Zerón y Jorge Martínez, le exigieron sumas de dinero a nombre de Portillo para evitar la confiscación del hotel.
El afectado formalizó la denuncia, señalando que Jorge Martínez y el abogado Jaime Banegas Zerón le comunicaron que debía depositar cerca de dos millones de lempiras para continuar operando.
Gavarrete se puso en contacto con el abogado Portillo, quien confirmó la solicitud de fondos a través de Banegas, justificándolo como parte de cambios internos en el proceso.
Sin embargo, tras realizar los depósitos, el empresario no recibió la renovación del contrato y se le ofrecieron otros edificios con nuevas demandas financieras.
Ante la falta de respuestas, Gavarrete consultó nuevamente con Portillo, quien aseguró que todo estaba en proceso y que no había problema.
El empresario afirma que esta red ha estafado a varias personas en la costa norte, y alentó a otros afectados a denunciar formalmente ante el Ministerio Público (MP) y a través de los medios de comunicación. La denuncia busca exponer las presuntas prácticas ilícitas y garantizar la transparencia en las investigaciones correspondientes.