El Consejo Nacional Anticorrupción en las últimas horas cuestionó el papel de la junta nominadora al momento de seleccionar la nómina final de los candidatos a magistrados de la Corte Suprema de Justicia.
La directora ejecutiva del CNA, Gabriela Castellanos señalo que “hay más sombras que luces en el proceso de selección de los candidatos a magistrados de la CSJ”, al mismo tiempo enfatizó que pese al compromiso público de la junta nominadora, el proceso de selección culminó sin explicaciones sobre la fuga de información.
En un mensaje a través de las redes sociales, Castellanos criticó que hubo un esquema de secretividad frente a la veeduría social ante las tachas y denuncias que fueron interpuestas contra los postulantes.
“No se conoció como se llevó cabo el proceso de calificación, debido a que la junta nominadora solo publicó la nota final de cada postulante; la sorpresa, una lista de personajes alejados del perfil ideal” sentenció Castellanos.
La directora de este órgano de sociedad civil explico que varios candidatos “con dudosa moral” se colaron porque el porcentaje relacionado con la ética profesional es el más bajo dentro de los tres requisitos que integra la matriz de evaluación, y por ende varios candidatos “con padrinos” aparecen en la lista final de 45.
“El hecho que tanto, Tirza Flores Lanza como Marlina Dubon la primera hermana y la segunda esposa del asesor presidencial Enrique Flores Lanza, integren el listado final demuestra que se omitieron las disposiciones del protocolo aprobada en el pleno de la Junta nominadora, ¿Por qué dejaron pasar el conflicto de parentesco entre ambas candidatas?”.
Castellanos concluyo que el trabajo realizado por la junta nominadora “se infravalora” porque queda a discrecionalidad del Congreso Nacional la elección de los nuevos magistrados de la Corte Suprema de Justicias. “La tradición es anteponer el favoritismo político sobre los méritos”.
