Roatán, Honduras
La investigación en curso sobre el caso de Angie Peña, dirigida por la Unidad Contra la Trata de Personas del Ministerio Público y la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), ha revelado la existencia de varios establecimientos vinculados al delito de trata de personas.
Entre estos negocios se encuentran The Dock Resort, Happy Harrys Hideaway, Ikigai e Ipanema en Roatán.
Según las investigaciones, en estos lugares se perpetraban abusos contra las víctimas, dejándolas marcadas de por vida con secuelas físicas, psicológicas y emocionales.
Como resultado, se ha solicitado la confiscación y la transferencia de propiedad a favor del Estado para estos establecimientos.
Ser víctima de explotación sexual o trata de personas conlleva un profundo impacto en la salud mental y emocional de las personas afectadas.
Además de los traumas evidentes, como problemas de salud mental y dificultades en el desarrollo emocional, estas experiencias pueden generar sentimientos de culpa, vergüenza y una disminución significativa en la autoestima.