
Redacción – En los últimos años, el injerto capilar se ha convertido en la opción número uno para hombres y mujeres que buscan combatir la alopecia.
La técnica consiste en trasplantar unidades foliculares desde la zona donante, generalmente la parte posterior de la cabeza, hacia las áreas con pérdida de cabello.
Los resultados suelen ser naturales y permanentes cuando el procedimiento es realizado por especialistas. Sin embargo, no todas las personas son aptas para someterse a esta cirugía, y hacerlo en condiciones no adecuadas puede generar frustración o complicaciones médicas.
Casos en los que no se recomienda un trasplante capilar
- Calvicie avanzada: si la zona donante es muy pobre o de mala calidad, el injerto no logra cubrir de manera estética las áreas despobladas.
- Pacientes muy jóvenes: la alopecia en edades tempranas suele avanzar rápido, por lo que se recomienda primero estabilizarla con tratamientos médicos.
- Caída de cabello muy leve: en casos iniciales, la cirugía puede dañar el pelo sano; lo mejor es recurrir primero a medicamentos.
- Alopecias no aptas: enfermedades como lupus, liquen plano o alopecia areata activa no son recomendables para injertos, ya que podrían empeorar la condición.
- Pelo muy fino o alopecia difusa: cuando no existe una zona donante fuerte, el trasplante pierde efectividad.
- Problemas médicos o psicológicos: personas con trastorno dismórfico corporal, tricotilomanía o enfermedades crónicas no controladas (diabetes, hipertensión, cardiopatías) no deberían someterse a la cirugía sin supervisión estricta.
- Hábitos poco saludables: fumadores y personas con daño solar severo en el cuero cabelludo pueden tener peores resultados.
Alternativas al injerto capilar
Para quienes no son candidatos, existen opciones menos invasivas que ayudan a frenar la caída del cabello y mejorar la apariencia:
- Mesoterapia capilar: microinyecciones con vitaminas y nutrientes que estimulan el folículo.
- Tratamientos médicos: fármacos como el minoxidil o finasterida ayudan a detener la caída y recuperar densidad.
- Suplementos: biotina, queratina y vitaminas fortalecen el cabello.
- Micropigmentación capilar: ideal para calvicie avanzada, crea un efecto visual similar al cabello rapado.
Decisión con asesoría médica
Antes de optar por un injerto capilar, los especialistas recomiendan una evaluación médica completa para descartar condiciones que hagan riesgosa o poco efectiva la cirugía. La clave está en diagnosticar a tiempo la causa de la alopecia y elegir el tratamiento más adecuado para cada paciente.