La prestigiosa revista británica The Economist calificó al sistema político de Honduras como “un régimen híbrido”, con elementos democráticos, pero también autoritarios.
El documento recoge datos sobre el pluralismo en los procesos electorales, la gobernabilidad, participación política y cultural. Asimismo, la funcionalidad del Estado y la garantía de libertades civiles en los países.
En tal sentido, Rolando Sierra, titular de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso-Honduras), señaló que el país debe de entrar en un fortalecimiento de las instituciones democráticas.
“Es fundamental en este momento el nombramiento de la nueva Corte Suprema de Justicia como un elemento o indicador de ese fortalecimiento de la democracia”, indicó Sierra.
El documento advierte de un oscuro camino hacia la autocracia en la región latinoamericana; incluyendo a Honduras que recientemente a mantenido inestabilidad política desde el 2009 con el Golpe de Estado.
La democracia comprende varios elementos, una porque es un Estado de derecho y esto implica elementos que garanticen toda una situación de la independencia de los diferentes poderes”, manifestó Julio Castro, docente de la Facultad de Sociología de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
Amenaza a la democracia
De acuerdo con el informe, la región de América Latina y el Caribe es un centro mundial para los cárteles transnacionales para la droga y el crimen organizado que representan una amenaza para la democracia.
Lo que, a su vez, según el estudio de The Economist, conduce a un deterioro de las libertades civiles. En esta línea, la influyente revista del Reino Unido recoge las acciones de la presidenta Xiomara Castro; quien aprobó un decreto de emergencia para restringir garantías constitucionales como medida de gobierno para abordar la criminalidad.
Los mismo que hicieron los gobernantes de Ecuador y El Salvador, este último señalado por socavar los controles y equilibrios democráticos; acercándose más a regímenes autoritarios.
“Puede ser un presidente fuerte, pero cuando hay un equilibrio de poderes, los excesos de ese mandatario los controlan los otros Poderes del Estados”, manifestó Julieta Castellanos, exrectora de la UNAH.