Tegucigalpa, Honduras – Desde hace dos semanas en el Hospital Escuela (HE), la baja de pacientes hospitalizados por sospecha de dengue permite que en sus dos salas febriles exista disponibilidad de camas para atender otro tipo de patologías.
Es así, que en una de las salas febriles con capacidad para 26 pacientes, las autoridades del centro asistencial decidieron dejar solamente 16 camas para menores con signos de alarma tras la picadura del zancudo; y las 10 camas restantes para pequeños que llegan con otras afecciones.
Miguel Osorio, portavoz del HE detalló que “gracias a la existencia de camas libres, tenemos cupos para niños y niñas que recibimos con procesos respiratorios agudos, cuadros diarreicos y lesiones por trauma a causa de los accidentes viales”.
Este lunes el centro asistencial amaneció con 31 pacientes hospitalizados con síntomas de dengue, de los cuales solo 2 ingresaron en las últimas horas. No hay ingreso de pacientes pediátricos en la Unidad de Cuidados Intensivos, Cuidados Intermedios, ni graves.
Por otro lado, el director por ley del HE, doctor Carlos Sánchez llamó a la población a evitar “relajarse” ante la caída en los casos de dengue.
“Debe desaparecer el mito de que por qué el dengue baja, los padres creen que el dengue se fue. Les Aclaramos que el dengue está presente y sigue igual de virulento con sus cuatro serotipos circulando”, dijo Sánchez.
El galeno reiteró que si aparece la fiebre se debe acudir de inmediato al centro de salud más cercano un busca de asistencia médica.
“La población deja que la fiebre esté presente hasta por 3 días, luego la fiebre desaparece, desconociendo que el virus está presente y actuando convirtiéndose en el preámbulo de un dengue grave que puede matar a la persona”.
Finalmente, recordó que el enfermo no debe automedicarse y que el arma más efectiva en la lucha contra el dengue es la eliminación de criaderos en casa.