El pontífice compartió la bendición Urbi et Orbi con un nuevo pedido de paz: “Suplico que cesen las operaciones militares”
Este lunes 25 de diciembre, el Papa Francisco pronunció desde el Vaticano su bendición “Urbi et Orbi” (“A la ciudad y al mundo”), momento en el que tradicionalmente ofrece una visión general de los conflictos mundiales. En esta ocasión, denunció la “desesperada situación humanitaria” de los palestinos en la Franja de Gaza, pidiendo la liberación de los rehenes aún retenidos y un alto el fuego.
“Hago un llamamiento para que se ponga fin a las operaciones militares, con su espantoso balance de víctimas civiles inocentes, y para que se ponga remedio a la desesperada situación humanitaria abriendo el camino a la llegada de ayuda humanitaria”, añadió ante varios miles de peregrinos congregados en la plaza de San Pedro.
Casi tres meses después del comienzo de la guerra entre Israel y Hamás, la situación humanitaria en la Franja de Gaza, donde el 85% de la población ha sido desplazada, es catastrófica, según la ONU. La ayuda humanitaria llega escasamente y está muy por debajo de las inmensas necesidades del devastado territorio palestino.
Este domingo por la noche, el Ministerio de Sanidad de Hamás anunció que un ataque israelí contra el campo de refugiados de Al Maghazi, en el centro de la Franja de Gaza, había causado la muerte de al menos 70 personas.
A primera hora del día, el último balance del gobierno de Hamás era de 20.424 palestinos muertos en ataques israelíes contra Gaza desde el inicio de la operación israelí, y más de 54.000 heridos. De ellos, el 70% eran mujeres y menores.
1.140 personas murieron en el ataque de Hamás del 7 de octubre, según datos facilitados por el gobierno israelí. El ejército israelí afirmó el jueves haber matado a más de 2.000 combatientes palestinos desde el fin de la tregua a principios de diciembre.