Edwin Arrieta, un cirujano colombiano, fue asesinado por su amigo, un chef español que descuartizó su cuerpo y luego intentó deshacerse de él.
El espeluznante suceso se registró en Tailandia, cuando ambos disfrutaban de unas vacaciones de socios en la isla de Koh Phangan.
Según el detenido, se vio obligado a matar al cirujano colombiano porque intentó tener sexo con él bajo amenazas de matar a su familia.
El cocinero español, hijo de un reconocido actor del país europeo, confesó el crimen asegurando que fue en defensa propia.
“Soy culpable, pero era su rehén. Me tenía como rehén. Era una jaula de cristal, pero una jaula. Me hizo destruir mi relación con mi novia, me ha obligado a hacer cosas que nunca hubiera hecho”, dijo chef al ser interrogado por las autoridades.
Daniel Sancho, hijo de Rodolfo Sancho, aseguró que la policía tailandesa lo ha tratado muy bien y que buscará por todos los medios ser trasladado a España para cumplir la pena en su país.
“Quiero volver a España, moved cielo y tierra para eso, seguid con la cobertura mediática”, rogó a los medios de comunicación de su país.
Por su parte, el gobierno de Colombia ha exigido justicia por la muerte del cirujano colombiano y ha calificado el crimen como repudiable.
El caso ha generado una ola de comentarios en contra del joven chef de 29 años de edad, que podría enfrentar la pena perpetua o condenas de 20 a 25 años de cárcel.
La familia del joven anunció que se contrató un equipo de profesionales para defender al agresor y lograr la pena mínima.
Algunas partes del cuerpo del cirujano colombiano aún no han sido recuperadas y las imágenes de los restos encontrados son espeluznantes.
Hasta el momento, se conoce que el chef español pagó más de mil dólares por intentar deshacerse de partes del cuerpo del cirujano colombiano al que descuartizó.