El gobierno francés aprobó en las últimas horas una polémica ley que permite activar la cámara y micrófono de los teléfonos de las personas que se encuentran bajo investigación.
La aprobación de la ley se da en medio de multitudinarias protestas en contra del gobierno de Emmanuel Macron tras la muerte de un adolescente en manos de la policía francesa.
Medios locales e internacional han destacado que la ley entrará en vigor en unos días y que se extenderá hasta el 2027.
“Se le permitirá acceder a distancia a la cámara y micrófono de los teléfonos móviles y otros dispositivos electrónicos de las personas que están bajo investigación de delitos castigados con al menos cinco años de cárcel”, se informó sobre la puesta en marcha de la nueva ley.