Martha Molina desapareció el 7 de mayo en el campamento Nuevo Amanecer, en Rosarito, Baja California, hasta donde asistió a un retiro espiritual, debido a que en los últimos días tenía problemas de depresión y su hijo le recomendó ir a un encuentro con ella misma para mejorar su salud espiritual.
Al ver a su mamá hundida en la depresión, su hijo -identificado únicamente como Rafael- buscó varias maneras de ayudarla, entre ellas terapias psicológicas, pero una amiga de él le habló sobre una experiencia espiritual para sanar heridas, algo que él consideró una señal para ayudar a su madre.
La señora fue al retiro en Tijuana con rumbo al rancho, ubicado en el Cerro del Coronel.
El día que culminaba el retiro una llamada cayó al teléfono del hijo, en la que le dijeron que su mamá había desaparecido del retiro.
El Heraldo de México informó los encargados del retiro dijeron la señora Martha se había escapado e incluso se llevó una mochila que no era de ella, por lo que sus pertenencias seguían allí.
Desde ese día sus familiares comenzaron a buscar a Martha, también el personal de Bomberos de Rosarito y policías municipales que participan en las diligencias.
Tras seis días de búsqueda, no han encontrado rastro de la señora de la tercera edad, y sus familiares responsabilizan a los administradores del retiro por no procurar el cuidado y bienestar de la señora .
“A mi mamá le hicieron algo, estoy seguro”, dijo Rafael a El Heraldo de México.
Rafael contó que notó muchas irregularidades en el grupo, en entrevista al medio antes mencionado relató que en la experiencia siempre hay guardia de seguridad, pero ese día casualmente no había nadie.
