
Tegucigalpa, Honduras – El ‘New Bar’, conocido popularmente como ‘Tito Aguacate’, celebró esta semana sus 80 años de fundación en Tegucigalpa, Honduras. Este icónico establecimiento, frecuentado por personas de todas las clases sociales, es famoso por su trago de la casa: el ‘calambre’.
“El bar se llama New Bar, pero como mi papá siempre tenía boca de aguacate, la gente le puso Tito Aguacate, y así nos quedamos”, explicó Fernando Pereira, hijo del fundador José Valentín Pereira, quien falleció en 1991. El bar fue inaugurado el 19 de febrero de 1945 por Pedro Maradiaga y comprado en 1957 por Pereira.
El ‘calambre’ nació como un remedio para la resaca, pero se convirtió en una bebida popular. Su preparación incluye hielo, limón, azúcar, un poco de gin y vino tinto, servido en un bote de vidrio con tapadera de rosca.
Durante décadas, el bar no permitía la entrada de mujeres, pero esto ha cambiado con el tiempo. Hoy, el establecimiento es visitado por músicos, políticos, abogados, artistas, obreros, campesinos, periodistas e incluso diplomáticos.
Las paredes del bar están decoradas con fotografías, publicaciones de diarios, banderines de equipos de fútbol y una imagen del dictador Tiburcio Carías Andino. También hay una gran fotografía enmarcada de José Valentín Pereira, en honor a su legado.
Coincidiendo con la celebración del aniversario, el ecuatoriano Andrés De la Vega visitó el bar junto a su esposa y amigos.
“Tito Aguacate es una inmersión en Tegucigalpa, un lugar donde te conectas con la historia y la cultura del país mientras disfrutas un calambre”, comentó. Entre los asistentes destacó la presencia de Héctor ‘Pecho de Águila’ Zelaya, anotador del primer gol de Honduras en un mundial.
‘Tito Aguacate’ sigue siendo un símbolo de la tradición y la identidad hondureña, ofreciendo un ambiente único donde convergen historias, amistad y un trago inolvidable.