
Redacción – Estados Unidos, Argentina, Ecuador, Paraguay y Antigua y Barbuda solicitaron formalmente a la Organización de Estados Americanos (OEA) la convocatoria de una sesión extraordinaria del Consejo Permanente el próximo martes, ante la creciente preocupación por el clima de incertidumbre que rodea las elecciones generales de Honduras, previstas para el 30 de noviembre.
En la petición, los países miembros señalaron que tanto la Secretaría General de la OEA como su Misión de Observación Electoral han advertido públicamente sobre riesgos a la autonomía de las instituciones electorales, retrasos en la organización del proceso y amenazas directas a funcionarios involucrados. “Estos acontecimientos merecen toda la atención del Consejo”, expresaron.
Conflicto entre CNE, TJE y Fiscalía dispara alarmas
La solicitud internacional llega después de una serie de decisiones internas que han encendido las alertas dentro y fuera del país. El fiscal general, Johel Zelaya, pidió un antejuicio contra dos magistrados del Tribunal de Justicia Electoral (TJE) y una de las tres consejeras del Consejo Nacional Electoral (CNE), a quienes la Fiscalía acusa de “conspiración” contra el proceso electoral.
Estas acciones han profundizado las tensiones entre ambos organismos, ya marcadas por intereses partidarios y diferencias sobre el manejo del proceso. Sectores políticos y analistas han advertido que la Fiscalía señalada por la oposición de actuar alineada al Partido Libertad y Refundación (Libre) estaría generando un clima de intimidación al amenazar con cárcel a funcionarios que, según la ley, deben operar con total independencia.
Llamado a respetar la institucionalidad electoral
Los cinco países enfatizaron su “compromiso con la defensa de las normas democráticas” y recalcaron que el pueblo hondureño debe poder votar con seguridad, libertad y en la fecha prevista.
Además, solicitaron que el Gobierno de Honduras facilite una presentación pública del CNE y el TJE ante el Consejo Permanente para explicar la situación.
El comunicado también insta a todas las autoridades hondureñas a actuar “con estricto apego al marco constitucional y jurídico”, especialmente en un momento en el que cualquier interferencia puede comprometer la transparencia del proceso electoral.
Con el reloj avanzando hacia el 30 de noviembre, la comunidad internacional refuerza su mirada sobre Honduras, mientras la crisis entre las instituciones electorales sigue escalando.


