
La Dirección Nacional de Servicios Policiales Fronterizos (DNSPF), en coordinación con el Grupo de Operaciones Especiales Tácticas (GOET) y la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia (SENAF), logró la recuperación de un menor de edad que se encontraba en situación de grave riesgo para su integridad física y psicológica.
Menor acompañado por un ciudadano extranjero
El adolescente, identificado únicamente como “Sebas”, de 16 años, originario de San Pedro Sula, Cortés, fue retenido en el Punto de Control Fronterizo Integrado de Corinto, cuando viajaba en compañía de un ciudadano de nacionalidad turca, identificado como Dükükcü.
El extranjero presentó un documento legal denominado “Autorización de Menor de Edad”, firmado por la madre del adolescente y certificado por un notario público, con el fin de trasladarlo hacia Guatemala. Sin embargo, la autorización no contaba con la firma del padre y presentaba inconsistencias que levantaron sospechas en las autoridades fronterizas.
Posible intento de trata de personas
Durante el procedimiento, los oficiales de migración detectaron contradicciones en las declaraciones del acompañante y en la documentación presentada, lo que llevó a la inmediata retención de ambos. La rápida acción policial evitó que el menor fuera trasladado fuera del país bajo circunstancias sospechosas, ante la posibilidad de que se tratara de un caso de trata o explotación infantil.
El adolescente fue entregado al SENAF, institución que ahora lo mantiene bajo custodia y protección especializada, garantizando su seguridad y brindándole atención integral mientras se resuelven los trámites legales correspondientes.
Coordinación institucional y seguimiento
Las autoridades destacaron la efectividad de los controles migratorios y la coordinación entre la Policía Fronteriza, el GOET y el SENAF, que permitió detectar a tiempo las irregularidades y proteger los derechos del menor.
Las investigaciones continúan para determinar los antecedentes del ciudadano extranjero y verificar la autenticidad del documento notariado. Mientras tanto, el joven permanecerá bajo resguardo estatal hasta que se garantice plenamente su bienestar.