
Oslo, Noruega. El Comité Nobel noruego anunció este viernes que la opositora venezolana María Corina Machado es la ganadora del Premio Nobel de la Paz 2025, en reconocimiento a su “incansable trabajo promoviendo los derechos democráticos del pueblo venezolano y su lucha por una transición pacífica hacia la democracia”.
La líder del movimiento Vente Venezuela, de 58 años, permanece en la clandestinidad desde agosto de 2024, tras la persecución desatada por el régimen de Nicolás Maduro luego de las elecciones presidenciales del 28 de julio del mismo año, en las que Machado no pudo participar por estar inhabilitada políticamente.
“Estoy en shock”: la reacción de Machado al recibir la noticia
En una llamada telefónica difundida por el diplomático Edmundo González Urrutia, quien se encuentra exiliado en España, Machado expresó entre lágrimas su sorpresa por la noticia.
“Estoy en shock. No me puedo creer esto”, dijo la opositora venezolana visiblemente emocionada.
Ambos líderes, que en 2024 recibieron juntos el Premio Sájarov a la Libertad de Conciencia otorgado por el Parlamento Europeo, ven ahora en este reconocimiento internacional un fuerte respaldo a la causa democrática venezolana.
Un símbolo de resistencia y unidad política
El presidente del Comité Nobel, Jorgen Watne Frydnes, destacó que Machado representa “uno de los ejemplos más extraordinarios de coraje civil en América Latina”.
Según Frydnes, la dirigente logró “unificar a una oposición históricamente dividida bajo una misma bandera: la demanda de elecciones libres y un gobierno representativo”.
Machado superó en la votación final a otros candidatos destacados, incluido el expresidente estadounidense Donald Trump, quien había sido promovido por varios sectores internacionales.
De adversaria de Chávez a símbolo democrático
María Corina Machado es una veterana dirigente política que desde sus inicios enfrentó al fallecido presidente Hugo Chávez, quien solía atacarla públicamente.
Tras años de trabajo político y persecución, logró convertirse en la principal figura de la oposición venezolana, uniendo fuerzas políticas diversas bajo la Plataforma Unitaria Democrática.
Su triunfo arrasador en las primarias de 2023, con el 92.5 % de los votos, marcó el inicio de un nuevo ciclo de esperanza democrática en Venezuela.
Sin embargo, la inhabilitación impuesta por la Contraloría General de la República, controlada por el chavismo, truncó su candidatura presidencial y la obligó a respaldar a González Urrutia como sustituto.