
Caracas, Venezuela – El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, arremetió este miércoles contra el Gobierno del expresidente estadounidense Donald Trump, al que acusó de financiar una “conspiración fascista” que, según él, pretende desestabilizar la paz del país.
Durante una alocución transmitida por el canal estatal Venezolana de Televisión (VTV), el mandatario pidió a las autoridades civiles, militares y policiales “afinar los planes de seguridad y de protección de la paz”, asegurando que Venezuela enfrenta una “trilogía del mal”.
De acuerdo con Maduro, esta “ecuación perversa” estaría conformada por tres componentes: el narcotráfico “uribista colombiano”, las bandas criminales que aún operan en el país y el financiamiento estadounidense a sectores opositores. “Frente a esa trilogía del mal, nosotros tenemos el arma secreta: la fusión perfecta popular-militar-policial”, declaró.
Aunque sostuvo que estos factores ya han sido “contenidos y derrotados”, advirtió que “no pueden subestimarse” porque según él hay sectores internos que promueven la desestabilización. “Aquí hay gente absolutamente desquiciada llamando a la guerra civil. No podemos bajar la guardia”, subrayó.
En medio de sus señalamientos, Maduro acusó directamente al exgobernador opositor César Pérez Vivas de “organizar núcleos terroristas para poner bombas y matar gente”, aunque no presentó pruebas que respalden esa grave acusación.
Las declaraciones del líder chavista surgen en un contexto de creciente tensión política tras las elecciones presidenciales celebradas en julio de 2024, en las que fue proclamado ganador por el Consejo Nacional Electoral (CNE), dominado por funcionarios afines al oficialismo.
Sin embargo, los resultados desglosados aún no han sido publicados, lo que ha generado críticas de la comunidad internacional y de sectores opositores que denuncian falta de transparencia.
Por su parte, el Gobierno de Estados Unidos, bajo la administración republicana, ha mantenido su respaldo al dirigente opositor Edmundo González Urrutia, a quien reconoce como presidente legítimo de Venezuela.
El secretario de Estado, Marco Rubio, reiteró el pasado 27 de julio el apoyo de Washington a la “restauración del orden democrático” y acusó a Maduro de liderar el llamado Cartel de los Soles, supuestamente vinculado al tráfico internacional de drogas.
Las acusaciones cruzadas alimentan aún más el clima de polarización en Venezuela, mientras organizaciones civiles y organismos internacionales urgen a las autoridades electorales a publicar los resultados detallados y garantizar condiciones democráticas y transparentes.