Tegucigalpa, Honduras
La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, urgió este lunes a «transformar el modelo económico» para lograr seguridad alimentaria, durante la 38 Conferencia Regional de la FAO para América Latina y el Caribe.
«Para que la seguridad alimentaria y nutricional sea sostenible y equitativa debemos transformar el modelo económico», afirmó en un discurso mediante videoconferencia ante los asistentes a la conferencia, que se inauguró este lunes en Guyana.
Castro, cuyo país ostenta la presidencia pro témpore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeño (Celac), explicó que el modelo económico debe «apoyar al campo, a los productores, crear incentivos y dar acceso al crédito y los mercados».
A su juicio, es «urgente promover la soberanía alimentaria» porque, aunque la región produce y exporta alimentos, persiste el hambre, la pobreza y las desigualdades. Todavía 43 millones de personas sufren hambre.
«La globalización no resolvió nuestros problemas, los agravó. Nos queda un largo y arduo camino para eliminar las causas estructurales de la dependencia y explotación a las que han sido sometidos nuestros recursos naturales y nuestros pueblos», señaló.
Castro llamó a dialogar y construir alianzas para diseñar políticas estructurales que incorporen a las mujeres, pueblos originarios y campesinos y regulen la tenencia, el uso de la tierra y el agua y la protección de la biodiversidad.
«La producción y acceso equitativo a los alimentos depende en gran medida de ello», añadió.
Esas políticas también deben fortalecer la agricultura familiar y los mercados locales, y modificar el modelo económico.
«Propongo modificar nuestro sistema económico e implementar políticas y medidas que aumenten la capacidad de producción en las comunidades latinoamericanas y caribeñas para convertir estos objetivos en una realidad», concluyó.
La 38 Conferencia Regional de la FAO para América Latina y el Caribe reúne a ministros de Agricultura y otros representantes de los 33 Estados miembros para abordar la lucha contra el hambre, la producción eficiente y sostenible, la adaptación al cambio climático y la reducción de desigualdades, entre otros.