
Tegucigalpa, Honduras – Las Fuerzas Armadas de Honduras (FFAA) emitieron un comunicado oficial en el que recalcan que, a partir de ahora, cualquier solicitud proveniente del Consejo Nacional Electoral (CNE) deberá ser dirigida exclusivamente a la presidenta constitucional de la República y comandante general de las FFAA, Iris Xiomara Castro Sarmiento.
Según el pronunciamiento castrense, esta medida se adopta para respetar la cadena de mando establecida por el Artículo 277 de la Constitución de la República, que establece que el jefe supremo de las Fuerzas Armadas es la presidenta de la nación.
“Se informa al CNE y a la ciudadanía que, en cumplimiento del Artículo 277, toda solicitud dirigida a las Fuerzas Armadas deberá pasar por la señora presidenta Xiomara Castro”, señala el comunicado.
FFAA reafirman compromiso con la seguridad electoral
Pese a este nuevo lineamiento, las Fuerzas Armadas aseguraron que mantendrán su compromiso de brindar seguridad en las instalaciones del CNE, tras solicitud formal del organismo electoral.
El alto mando detalló que las tropas continuarán protegiendo los edificios del CNE para garantizar un proceso electoral transparente y ordenado de cara a las elecciones generales del 30 de noviembre de 2025.
Además, reiteraron su disposición de colaborar con las instituciones del Estado “para fortalecer la democracia y la seguridad nacional, siempre en cumplimiento de los procedimientos establecidos”.
Crisis institucional en el CNE complica el proceso electoral
Este comunicado se da en un contexto de grave crisis interna en el CNE, donde las tensiones entre los tres consejeros propietarios Cossette López (Partido Nacional), Ana Paola Hall (Partido Liberal) y Marlon Ochoa (Libre) han paralizado decisiones clave, como la implementación del sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP).
Tras las elecciones primarias del 9 de marzo, marcadas por fallos logísticos y retrasos en la entrega de material electoral, especialmente en Tegucigalpa y San Pedro Sula, se intensificaron los señalamientos de sabotaje.
El Partido Nacional ha acusado al oficialismo de intentar manipular el proceso, mientras el oficialismo asegura que se busca “obstruir” avances técnicos como el TREP y la verificación humana de resultados.
Con este nuevo giro en la relación entre el CNE y las Fuerzas Armadas, la tensión institucional se eleva en un momento clave para el futuro democrático del país.