La extorsión obligó a una familia hondureña a huir del país y cerrar las puertas de su autolote ubicado en la capital, luego que un delincuente hiriera a dos de sus empleados con un arma de fuego.
Según la narración de uno de los afectados del autolote Imperio, ubicado en Ciudad Nueva, el pasado 4 de octubre a las 2:00 p. m., un individuo a bordo de una motocicleta llegó al negocio para dejar un teléfono, medida usada por extorsionadores para comunicarse con sus víctimas.
“Entregándoselo a uno de los empleados, no sin antes disparar en reiteradas ocasiones hiriendo a dos de los trabajadores que se encontraban en ese momento”, contó la persona que prefirió dejar su identidad como anónima.
Tras recibir los impactos de bala, los lesionados fueron remitidos al Hospital Escuela, de Tegucigalpa, para recibir asistencia médica, sin embargo uno de ellos habría fallecido.
“Los propietarios comentan que se acababan de mudar a ese lugar (Ciudad Nueva) ya que antes estaban ubicados en otro punto del cual salieron huyendo por la misma situación (extorsión)”, continuó.
Asimismo, explicó que los dueños del local recibieron llamadas y mensajes donde los intimidaron para que paguen “grandes sumas de dinero” por motivo de extorsión.
Finalmente, los afectados pidieron a los autoridades tomar cartas en el asunto para erradicar este flagelo.
