Olancho, Honduras – Un bebé de 10 meses, identificado como Dylan Alejandro González Suazo, perdió la vida en la comunidad de Sierra de Lepaguare, Juticalpa, Olancho, luego de ingerir accidentalmente un líquido para eliminar piojos.
Una tragedia inesperada
Según el testimonio de la madre, el menor consumió el producto en un descuido mientras ella lo aplicaba a otra de sus hijas.
Al notar los signos de intoxicación, la mujer lo trasladó de inmediato al Hospital General San Francisco, donde los médicos confirmaron su fallecimiento.
Las autoridades de Medicina Forense realizaron el levantamiento del cuerpo y lo remitieron a la morgue judicial de Tegucigalpa para practicar la autopsia correspondiente y determinar con precisión la causa de muerte.
Otro caso similar en Olancho
Este trágico incidente se suma a otro ocurrido el pasado 15 de enero en la comunidad de Maor, Dulce Nombre de Culmí, donde dos niñas fallecieron tras ingerir veneno para ratas que había sido colocado en su hogar.
Ante estos casos, las autoridades han reiterado el llamado a los padres de familia para extremar precauciones con sustancias tóxicas dentro del hogar y evitar más tragedias que enluten a las familias hondureñas.
