
Tegucigalpa, Honduras. Ante las constantes lluvias que han golpeado la capital hondureña en los últimos días, el personal de la Unidad Municipal de Agua Potable y Saneamiento (UMAPS) ejecuta acciones de reparación y mantenimiento en distintos puntos de Tegucigalpa para prevenir daños mayores en la red de alcantarillado y evitar el desbordamiento de aguas negras.
Uno de los principales trabajos se realizó en la colonia Miramontes, donde cuadrillas de la institución sustituyeron una tubería de concreto completamente dañada ubicada en un área de servidumbre.
La línea fue reemplazada por un lance de PVC, más resistente y duradero, lo que permitió solventar el derrame de aguas negras que afectaba las calles de la zona.
“El cambio se realizó con éxito, garantizando un mejor flujo del sistema sanitario y eliminando los malos olores que afectaban a los vecinos”, informaron técnicos de UMAPS.
Rehabilitan línea principal entre Concepción y Kennedy III
La institución también informó que continúa trabajando en la tubería principal de bombeo que conecta Concepción con Kennedy III, la cual sufrió daños a causa del crecimiento del caudal del río.
“Estamos tratando de repararla lo antes posible, pero la crecida del río ha dificultado el acceso y no hemos podido trabajar de manera continua”, explicó el personal en el sitio, asegurando que los esfuerzos se mantienen para restablecer el servicio en el menor tiempo posible.
Intervención en Loma Linda por socavón
Además, cuadrillas de la Subgerencia de Alcantarillado Sanitario y Pluvial trabajan en el cambio de una tubería de 18 pulgadas de PVC en las cercanías del edificio de INGEOMIN, en la colonia Loma Linda, donde se detectó un posible socavón.
Los trabajos incluyeron la apertura del terreno, la extracción del tramo dañado, la instalación de la nueva tubería y finalmente el relleno del agujero, con el propósito de rehabilitar el paso peatonal y vehicular antes de finalizar la jornada.
UMAPS reiteró su compromiso de atender con prontitud las emergencias provocadas por las lluvias, priorizando los sectores más afectados por los daños en la infraestructura sanitaria y el riesgo de contaminación ambiental.