El designado presidencial consideró que amenazar un aeropuerto que está dando resultados no traerá ningún beneficio al país
El designado presidencial Salvador Nasralla consideró que el ataque contra el Aeropuerto Internacional de Palmerola realizado por el ministro de la Secretaría de Infraestructura y Transporte (SIT), Mauricio Ramos, tiene como objetivo crear caos en el país.
Nasralla afirmó que las autoridades siguen una agenda para crear este caos y opinó que con las acusaciones de Ramos contra Palmerola, las autoridades “Lo que andan buscando es crear más caos. Ahora que se logró que la gente se acostumbrara a Palmerola y que en el aeropuerto está habiendo un gran movimiento de pasajeros, lo que dicta (a las autoridades) su librito del Foro de Sao Paulo es crear caos. Buscan fregar lo que está funcionando”, criticó.
El designado presidencial explicó que la postura del ministro de la SIT de “ponerse en rebeldía” contra la concesión del aeropuerto no traerá ningún beneficio al país.
“Con eso de decir que ya no van a seguir apoyando (a Palmerola) lo que van a hacer es fregar más al pueblo hondureño”.
Nasralla señaló que pueden haber otras posibles motivaciones ocultas detrás del ataque contra la concesionaria que opera a Palmerola y advirtió que las autoridades “Lo que están buscando es decir ‘dame dinero para continuar en el poder y sino te quito la concesión’. Eso es lo que ocurre en Honduras, son puros mafiosos”, lamentó.
El designado manifestó que en lugar de amenazar una obra que está funcionando bien, se debería buscar cómo crear más infraestructura que modernice el transporte hacia la terminal aérea.
Según Nasralla, las autoridades “Lo que deberían hacer, y lo que estaría haciendo yo como tomador de decisiones, sería pedirle por ejemplo a un Gobierno extranjero ayuda para la construcción de un tren que conduzca de Tegucigalpa a Palmerola para habilitar este transporte. Se puede renegociar con la compañía que tiene los derechos de Palmerola en qué medida ellos pueden participar en ese asunto también”, indicó.
