Panamá
El Ministerio de Exteriores de Panamá anunció la denegación del salvoconducto solicitado por el expresidente Ricardo Martinelli para abandonar el país con destino a Nicaragua, donde ha recibido asilo político. La Cancillería fundamenta la negativa en disposiciones de las Convenciones sobre Asilo de 1928 y 1933.
Este viernes, la embajadora de Nicaragua en Panamá fue convocada para recibir la comunicación oficial sobre el rechazo del salvoconducto. La Cancillería recordó a Nicaragua su obligación de preservar las funciones de la Misión Diplomática, advirtiendo que cualquier acción del expresidente desde la embajada que afecte la política interna de Panamá será considerada una injerencia con consecuencias diplomáticas.
Ricardo Martinelli, quien permanece refugiado en la embajada nicaragüense en Panamá, ha expresado abiertamente su desacuerdo con el Gobierno panameño, acusando persecución política. Se espera una orden de detención por una sentencia de más de 10 años de prisión y una multa de 19,2 millones de dólares por blanqueo de capitales, una condena que él atribuye a motivos políticos y por la cual solicitó asilo, alegando incluso un presunto plan para asesinarlo.
Estados Unidos condenó la concesión de asilo por parte de Nicaragua, considerándola como un intento del presidente Daniel Ortega de socavar el Estado de derecho y subvertir la justicia. La familia Martinelli ha enfrentado problemas legales en Estados Unidos, con los hijos del expresidente admitiendo en suelo estadounidense el blanqueo de millones de dólares en sobornos de Odebrecht.
La situación política de Martinelli también se ve afectada, ya que el Tribunal Electoral aclaró que, una vez obtenga la copia de la sentencia en firme, procederá conforme a la Constitución en relación con su inhabilitación política, previamente planeada como candidato presidencial para las elecciones del 5 de mayo.
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