Migrantes irregulares venezolanos se aglomeraron en el principal aeropuerto de Panamá en busca de un boleto para regresar a Venezuela luego que EEUU les cerró la frontera terrestre, por donde pretendían entrar a ese país tras un viaje que incluye cruzar la peligrosa selva del Darién.
«El Aeropuerto Internacional de Tocumen y estamentos de seguridad realizan las tareas de coordinación para atender dignamente y preservar el orden ante la llegada masiva de ciudadanos migrantes venezolanos, que procuran regresar a su país vía aérea», dijo en un breve comunicado la administración de la terminal.
Las operaciones en las terminales 1 y 2 de Tocumen no se vieron afectadas y se desarrollaron «de manera regular, mientras las entidades competentes» realizaban «las gestiones de transporte para este grupo de personas», agregó el comunicado del aeropuerto.
Los viajeros irregulares fueron retirados del sitio en autobuses y llevados a un refugio temporal habilitado por la Embajada de Venezuela, que se va a encargar de otorgarles salvoconductos y el apoyo necesario para que puedan salir por vía aérea de Panamá, de acuerdo con la información disponible.
«Nos fuimos (de Venezuela) por el sueño americano y lamentablemente no se cumplió (…) queremos retirarnos lo más pronto posible» de Panamá, dijo uno de los migrantes venezolanos que llegó al Aeropuerto Internacional de Tocumen, que sirve a la capital panameña y es un centro regional de conexiones.
La canciller de Panamá, Janaina Tewaney, dijo el viernes que «migrantes que tienen una intención de retorno a Venezuela han estado siendo acogidos por la Misión Venezolana en Panamá y los mismos se están encargando de llevar a cabo el retorno a Venezuela».
«De hecho, la cifra que nos compartieron es un aproximado de 435 que ya a la fecha han sido retornados por medio de vuelos chárter, y también tenemos entre hoy y mañana un retorno de 200» más, precisó la ministra de Relaciones Exteriores de Panamá.
El retorno voluntario de los migrantes irregulares es un tema que «se está coordinado por medio de Cancillería, Migración y la Misión de Venezuela en Panamá, que ha tomado la responsabilidad y está llevando a cabo los movimientos específicos de aquellos irregulares que tienen un interés voluntario de retornar», agregó.
Panamá es la puerta de entrada a Centroamérica desde el sur. Este año han llegado al país tras cruzar la selva del Darién, la frontera natural con Colombia, alrededor de 190,000 viajeros irregulares, una cifra sin parangón, y más de 70 % de ellos venezolanos. Todos tienen el objetivo de llegar a Estados Unidos.
Es así que desde la semana pasada Estados Unidos aplica una nueva política para los venezolanos: el que entre de forma irregular por la frontera terrestre con México o que haya llegado en igual circunstancia a Panamá, será expulsado de inmediato hacia territorio mexicano.
Estados Unidos anunció asimismo un programa que da estatus legal por 2 años a 24,000 venezolanos que lleguen en avión y dispongan de un patrocinador.
Este viernes, familias venezolanas abandonaron México, de manera voluntaria y por la frontera con Guatemala, rumbo a Panamá y Costa Rica, ante las nuevas medidas de Estados Unidos que contemplan su deportación inmediata si cruzan a ese país por vía terrestre.