
Tegucigalpa, Honduras – El director ejecutivo del Instituto de la Propiedad (IP), Francisco Bocanegra, informó que las nuevas placas vehiculares podrían comenzar a llegar a Honduras entre diciembre de 2025 y enero de 2026, siempre y cuando el proceso de licitación inicie de forma inmediata y sin retrasos.
“Si hoy empezara la licitación, recordemos que es un proceso ya establecido, no podemos saltarnos tiempos, y si comenzamos el proceso hoy, sin dilatarlo, con celeridad procesal, estarían siendo entregadas allá por el mes de diciembre o incluso en enero del año 2026”, expresó Bocanegra en una entrevista brindada al programa Al Banquillo, transmitido por TSi.
El funcionario detalló que el país enfrenta un déficit de más de 300,000 placas vehiculares, situación que ha generado molestias e incertidumbre entre los propietarios de vehículos, quienes deben circular con permisos provisionales ante la falta del material metálico.
Además, Bocanegra denunció que la licitación anterior estuvo plagada de irregularidades. “El tema de la adquisición de placas históricamente está plagado de corrupción.
Por ejemplo, estas últimas placas las actuales tengo la información donde para poder hacer la licitación y adjudicación a la empresa que las proveyó, se establecieron requisitos que ninguna otra empresa podía cumplir. Desde ahí había gato encerrado”, denunció.
También señaló que debido a estos procesos opacos, el costo de adquisición se elevó considerablemente.
“Para traer placas a Honduras se necesitan alrededor de 900 millones de lempiras”, subrayó.
La escasez persiste y los permisos seguirán vigentes
Ante la crisis por la falta de placas, el gobierno ha permitido el uso de permisos de circulación provisionales, especialmente para vehículos nuevos, como una medida paliativa para evitar sanciones durante el proceso de registro.
Esta medida seguirá vigente hasta que se regularice el abastecimiento.
Actualmente, una mesa técnica interinstitucional ya está trabajando en el diseño de un nuevo proceso legal y transparente para la adquisición de placas, según aseguró el titular del IP.
La última convocatoria de licitación se realizó a finales de 2024, pero fracasó nuevamente, lo que obligó a hacer una compra bajo emergencia ante el colapso en el Registro Vehicular.
Ahora, la ciudadanía espera que el nuevo proceso avance sin trabas ni favoritismos, en medio de la creciente exigencia por respuestas concretas ante un problema que afecta a miles de hondureños.