Cortés, Honduras – En una operación de alto impacto, la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) logró ubicar sano y salvo a un individuo que había simulado su propio secuestro con el fin de obtener 80,000 lempiras de sus familiares el “Día de San Valentín”.
La búsqueda fue liderada por un equipo de la Unidad Nacional Antisecuestros (UNAS), quienes realizaron operativos de inteligencia que culminaron con la localización de la supuesta víctima en el barrio Cabañas de San Pedro Sula, Cortés.
Antecedentes del caso
El individuo, un hombre de 22 años dedicado a la venta de productos, es originario de Macuelizo, Santa Bárbara, y actualmente reside en el sector de la Rivera Hernández, San Pedro Sula.
El 14 de febrero de 2025, salió de su hogar en una motocicleta y no regresó.
Al día siguiente, su hermana recibió una llamada en la que él afirmaba haber sido secuestrado y que sus captores exigían 80,000 lempiras para su liberación, advirtiendo que atentarían contra su vida si no se cumplía la exigencia.
Ante la denuncia, la DPI activó un equipo especializado que, tras labores investigativas, localizó la motocicleta del supuesto secuestrado estacionada en una vivienda. Esto llevó a los agentes a establecer vigilancia para determinar la veracidad de los hechos.
Con el avance de la investigación, se logró ubicar al individuo en la casa de un amigo en San Pedro Sula, descartando la versión del secuestro.
Confesión y consecuencias legales
Durante el interrogatorio, el sujeto admitió haber fingido su secuestro para solicitar dinero a su familia, argumentando que necesitaba saldar deudas personales.
Según el artículo N.º 529 del Código Penal hondureño, este tipo de acción constituye el delito de simulación de infracción inexistente. Los agentes encargados del caso presentarán al sospechoso ante las autoridades correspondientes para que se le ejerza acción penal.
El individuo fue trasladado a Medicina Forense para una evaluación médica y posteriormente quedará a disposición de la Fiscalía.
Llamado a la población
Las autoridades instan a la ciudadanía a mantenerse alerta ante posibles casos de autosecuestro, un delito en el que una persona finge haber sido privada de libertad con el objetivo de obtener beneficios económicos.
Se recomienda estar atentos a señales de alerta como contradicciones en relatos, comportamientos inusuales y solicitudes de rescate sin fundamentos sólidos.
La DPI reafirma su compromiso en la lucha contra este tipo de delitos y la protección de la ciudadanía.
