Washington, EE. UU. — El Departamento de Estado de Estados Unidos anunció una nueva política de restricción de visados dirigida a ciudadanos de Centroamérica que, según las autoridades norteamericanas, colaboren de forma intencionada con el Partido Comunista Chino (PCC) y realicen actividades que debiliten el Estado de derecho en la región.
La medida establece que las personas señaladas por dirigir, autorizar, financiar o brindar apoyo a acciones que afecten la estabilidad de Centroamérica quedarán inhabilitadas para ingresar a Estados Unidos, junto con sus familiares directos.
“Estamos imponiendo estas restricciones de visa en virtud de esta nueva política a varios ciudadanos centroamericanos que participaron anteriormente en estas actividades. Como resultado, estas personas y sus familiares no podrán ingresar a Estados Unidos”, indicó la dependencia estatal.
Buscan frenar el avance chino en Centroamérica
De acuerdo con el comunicado, las sanciones forman parte del compromiso del presidente Donald Trump de proteger la prosperidad económica y los intereses de seguridad nacional de Estados Unidos en el hemisferio.
“Continuamos promoviendo la rendición de cuentas de ciudadanos centroamericanos que colaboren intencionadamente con el Partido Comunista de China en América Central y desestabilicen nuestro hemisferio”, enfatizó el Departamento de Estado.
Estas medidas se adoptan bajo la sección 212(a)(3)(C) de la Ley de Inmigración y Nacionalidad, lo que refuerza el uso de mecanismos migratorios como herramientas de presión política y diplomática.
En el trasfondo, la decisión busca frenar el avance de China en la región, donde en los últimos años ha logrado desplazar a Taiwán como socio estratégico.
Actualmente, solo Guatemala y Belice mantienen lazos con Taipéi, mientras las demás naciones centroamericanas reconocen a Pekín.
