
Tegucigalpa, Honduras – La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, felicitó públicamente este domingo a José Antonio Kast tras su victoria en la segunda vuelta presidencial de Chile, un mensaje que contrasta con la postura de su propio partido, Libertad y Refundación (Libre), que aún se resiste a reconocer la contundente derrota sufrida en las urnas hondureñas el pasado 30 de noviembre.
El saludo de la mandataria hondureña fue difundido a través de su cuenta personal en la red social X, donde expresó: “Felicito a @JoseAntonioKast por haber sido electo Presidente de la hermana República de Chile”. En el mismo mensaje, Castro destacó el valor de los procesos democráticos como pilar de la integración regional.
“La democracia y los procesos pacíficos fortalecen la relación histórica entre nuestros pueblos y consolidan la comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (CELAC). Felicidades al pueblo chileno”, añadió la jefa del Ejecutivo hondureño.
El pronunciamiento de Castro se da en un contexto político complejo, marcado por las tensiones internas en Libre, partido que todavía no reconoce oficialmente la derrota electoral en Honduras, pese a la amplia diferencia reflejada en los resultados preliminares.
Reacciones internacionales tras el triunfo de Kast
La victoria de José Antonio Kast, quien se impuso con el 58.1 % de los votos frente al 41.8 % de la candidata izquierdista Jeannette Jara, con más del 99 % del escrutinio completado, generó una ola de reacciones en América y otras regiones del mundo.
Entre los primeros en felicitar al nuevo presidente chileno estuvieron líderes como Marco Rubio, desde Estados Unidos; Javier Milei, presidente de Argentina; Claudia Sheinbaum, mandataria de México; y Luiz Inácio Lula da Silva, presidente de Brasil. En sus mensajes, coincidieron en destacar la cooperación bilateral, la seguridad regional y el control migratorio como ejes clave de la futura relación con el nuevo Gobierno chileno.
No todas las reacciones fueron favorables. El presidente de Colombia, Gustavo Petro, lanzó duras críticas tras el resultado electoral, advirtiendo que en América Latina “vienen los vientos de la muerte” y llamando a los países de la antigua Gran Colombia a “resistir con la espada de Bolívar en alto”.
Petro sostuvo que “el fascismo avanza” en la región y afirmó que jamás estrecharía la mano de “un nazi y un hijo de nazi”, en declaraciones que compararon el triunfo de Kast con el legado del exdictador chileno Augusto Pinochet, generando polémica internacional.
Mientras tanto, el triunfo de Kast consolida un giro político en Chile y reconfigura el mapa ideológico de América Latina, en un escenario donde las felicitaciones diplomáticas contrastan con fuertes advertencias desde sectores de izquierda.



