
Tegucigalpa, Honduras – El Gobierno de Nicaragua dejó sin efecto este viernes el nombramiento de su embajadora en Honduras, Iris Audelly Acuña Huete, en respuesta al desacuerdo con la declaración final de la IX Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), celebrada esta semana en Tegucigalpa.
A través de una publicación en el diario oficial La Gaceta, la Presidencia de Nicaragua, encabezada por Daniel Ortega y Rosario Murillo, anunció que se cancela el nombramiento de Acuña Huete como Embajadora Extraordinaria y Plenipotenciaria ante el Gobierno de Honduras, cargo que había sido oficializado el 20 de septiembre de 2023.
“El presente acuerdo surte sus efectos a partir de esta fecha“, indicó el documento oficial, sin dar más detalles sobre la salida de la diplomática.
Nicaragua se suma así a los gobiernos de Argentina y Paraguay, que también expresaron su inconformidad al denunciar que “no hubo consenso” en la aprobación del documento final de la cumbre, lo que ha generado tensiones diplomáticas en la región.
Hasta el momento, las autoridades hondureñas no han emitido una reacción pública sobre la decisión del gobierno nicaragüense.