
Israel – Pese a los llamados urgentes de la comunidad internacional a cesar la violencia, Israel e Irán han intensificado sus ataques en una escalada militar que amenaza con desestabilizar aún más a todo Oriente Medio.
Este domingo 15 de junio, Irán lanzó su séptima oleada de misiles contra Israel desde que comenzó esta nueva fase del conflicto, mientras que la fuerza aérea israelí respondió con una serie de bombardeos sobre Teherán y otras zonas estratégicas del país persa.
En uno de los ataques más contundentes hasta ahora, el ejército israelí destruyó un avión de reabastecimiento iraní en el aeropuerto de Mashad, ubicado a más de 2,300 kilómetros de distancia, convirtiéndose en el ataque de mayor alcance desde el inicio de su ofensiva. Israel también confirmó haber atacado instalaciones del Ministerio de Defensa iraní y puntos clave relacionados con el programa nuclear del régimen islámico.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, advirtió que Irán “pagará un alto precio por matar civiles, mujeres y niños”, tras la muerte de al menos siete personas, incluidos dos menores, por el impacto de un misil en un edificio residencial en Bat Yam.
Explosiones en Teherán y múltiples muertos
Medios iraníes reportaron múltiples explosiones en Teherán, incluyendo ataques a zonas residenciales y al cuartel de la Policía capitalina. Cinco coches bomba estallaron en distintos puntos de la ciudad, lo que según medios oficiales fue una maniobra israelí tras la defensa antiaérea iraní.
Al menos cuatro miembros de la Guardia Revolucionaria iraní murieron en uno de los ataques a la provincia de Jorasán del Sur, lo que eleva la cifra de muertos a más de 180 desde que comenzó la escalada, aunque estas cifras aún no son confirmadas por todas las autoridades.
Reacciones diplomáticas y promesas de paz
En medio de la creciente tensión, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró que “pronto habrá paz entre Israel e Irán”, insinuando que se llevan a cabo conversaciones y reuniones clave para frenar el conflicto. Sin embargo, Irán rechazó participar en una reunión prevista con Washington sobre su programa nuclear, en protesta por los ataques israelíes.
Por su parte, el canciller iraní, Abás Araqchí, declaró que los ataques de su país son en defensa propia y que “si Israel se detiene, Irán también lo hará”.
Líderes como el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y los ministros de Exteriores de Rusia, Alemania y Turquía se sumaron al clamor internacional por un cese inmediato al fuego.
El temor de una guerra regional
La comunidad internacional se mantiene en alerta ante la posibilidad de una guerra abierta que implique a otras potencias y actores del Medio Oriente. La intensificación de los ataques, el uso de drones y misiles de largo alcance y la falta de voluntad de ambas partes para detener la violencia agravan un panorama ya frágil.
Por ahora, los esfuerzos diplomáticos parecen insuficientes frente a la determinación de ambos gobiernos de continuar con sus operaciones militares, en lo que se perfila como uno de los mayores desafíos para la estabilidad global en 2025.