
Tegucigalpa, En el marco del Domingo de Ramos, el arzobispo de Tegucigalpa, monseñor Vicente Nacher, exhortó a los hondureños a vivir los días santos con profundo recogimiento espiritual, afirmando que la Semana Santa no debe verse únicamente como un tiempo de descanso, sino como una oportunidad para renovar la fe y la esperanza en Cristo.
“Cristo es la esperanza que no defrauda”
Durante la homilía pronunciada en el atrio de la Catedral Metropolitana San Miguel Arcángel, monseñor Nacher recordó a los feligreses que estos días representan el núcleo del cristianismo.
“No son simplemente días de vacaciones, son sobre todo, días de fe en que Cristo es la esperanza que no defrauda. Estos días contienen una fuerza espiritual enorme, no los desaprovechemos”, expresó.
El arzobispo enfatizó que en la Semana Santa se condensa el sentido más profundo de la vida cristiana.
“En esta semana está el resumen de nuestra existencia y el motivo de nuestra esperanza; velemos y oremos porque ha llegado la hora del cumplimiento de la promesa en la cual se expresa que nuestra vida no es una repetición monótona, sino un peregrinar hacia Cristo”.
La Pascua: memoria viva del amor de Dios
Monseñor Nacher también destacó que la Pascua no es un simple recuerdo histórico, sino una memoria viva de la redención.
“La Pascua del Señor no es solo un recuerdo, es una memoria eficaz y real de los hechos más determinantes y esperanzadores de toda la historia. El mismo Dios toma nuestra condición humana y acepta cargar con nuestras culpas”, afirmó.
Inicio de la Semana Mayor
Con la procesión de Domingo de Ramos y la celebración litúrgica, la Iglesia Católica en Honduras da inicio formal a las actividades de Semana Santa, tiempo en el que se conmemoran la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo.