Estados Unidos – El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró este miércoles que México se comprometió a detener el flujo migratorio hacia su frontera sur “con efecto inmediato”. Sin embargo, ni su equipo ha ofrecido detalles del supuesto acuerdo, ni el Gobierno mexicano ha confirmado dichas acciones.
“¡México detendrá a las personas que se dirigen hacia nuestra frontera sur! ESTO AYUDARÁ ENORMEMENTE A DETENER LA INVASIÓN ILEGAL DE ESTADOS UNIDOS. ¡Gracias!”, escribió Trump en su red social, Truth Social.
El anuncio llegó tras una conversación telefónica entre Trump y la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, quien asumió el cargo recientemente.
Según Trump, la mandataria habría aceptado implementar medidas inmediatas para detener a los migrantes y reforzar la seguridad en la frontera sur.
Además, destacó que la charla incluyó temas relacionados con el tráfico de drogas, especialmente el fentanilo.
Sin embargo, Sheinbaum presentó una versión diferente de los hechos. A través de sus redes sociales, calificó la conversación como “excelente” y detalló que discutieron estrategias mexicanas para abordar la migración, subrayando que no hay caravanas migrantes dirigiéndose a la frontera norte gracias a la atención brindada dentro de México.
También enfatizó el respeto a la soberanía mexicana en cualquier colaboración con Estados Unidos.
“No hemos asumido compromisos que comprometan nuestra soberanía ni hemos accedido a detener la migración con las características señaladas por Trump”, indicó Sheinbaum.
¿Estrategia de negociación?
El anuncio de Trump ha generado especulación sobre si podría tratarse de una táctica de presión política, similar a las que empleó durante su primer mandato.
La conversación telefónica ocurrió pocos días después de que Trump amenazara con imponer un arancel del 25 % a los productos importados desde México y Canadá, además de un 10 % adicional a bienes provenientes de China.
Analistas destacan que cualquier acuerdo de esta naturaleza enfrenta limitaciones legales, ya que Trump no asumirá el poder hasta el 20 de enero de 2025.
Por ahora, Joe Biden sigue siendo el presidente en funciones, lo que limita las acciones inmediatas del equipo de transición del mandatario electo.
La tensión en torno a las declaraciones de Trump refleja la complejidad de las relaciones entre ambos países, especialmente en temas como migración, comercio y seguridad fronteriza.