Washington, EE.UU.
Una serie de tornados azotaron el estado de Oklahoma el sábado por la noche, dejando un rastro de destrucción que se cobró la vida de al menos cuatro personas, incluido un bebé de cuatro meses, según informó el gobernador Kevin Stitt.
Los tornados, que continuaron el viernes, provocaron una situación de emergencia en la región, con el gobernador declarando doce condados en estado de “desastre por emergencia” mientras las autoridades evalúan el alcance de los daños.
Un tornado golpeó el oeste del condado de Hughes, dejando varios edificios dañados y causando heridas a al menos cuatro personas, tres de ellas de gravedad, además de las trágicas muertes de un adulto y un menor.
En Sulphur y Marietta, otros tornados causaron estragos, obligando a la Cruz Roja a establecer refugios para los afectados. La cifra de personas sin electricidad alcanzó las 33.000 el domingo por la mañana.
Los tornados del viernes también causaron graves daños en Nebraska e Iowa, incluido el derrumbe de un edificio con personas dentro y la destrucción de cientos de hogares.
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