Esta iniciativa de investigación aplicada pretende favorecer la equidad y la inclusión en la educación en las comunidades rurales del país, mediante el uso eficaz de las tecnologías digitales.
Tegucigalpa, Honduras
Con el Proyecto de Educación Digital Rural e Inclusiva el Gobierno de la Presidenta Xiomara Castro Sarmiento, a través de la Secretaría de Educación, busca fortalecer el sistema educativo a través del uso eficiente de tecnologías para el aprendizaje.
La propuesta se orienta en favorecer tanto espacios de enseñanza y aprendizaje presenciales, como híbridos y a distancia.
De igual manera, esta iniciativa propone el uso de recursos tecnológicos y culturales disponibles, siendo un proyecto liderado por la Fundación Ceibal de Uruguay en articulación con la Secretaría de Estado en el Despacho de Educación, en el marco del Intercambio en Conocimiento e Innovación de la Alianza Global para la Educación, un esfuerzo conjunto GPE, con el Centro de Investigaciones para el Desarrollo Internacional De Canadá, contando con la colaboración de la Oficina de la UNESCO en San José y el apoyo de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán.
El Proyecto de Educación Digital Rural e Inclusiva, es una iniciativa de investigación aplicada que busca favorecer la equidad y la inclusión en la educación en las comunidades rurales del país, mediante el uso eficaz de las tecnologías digitales y sus adaptaciones para el aprendizaje presencial combinado con la modalidad híbrida.
“En Honduras estamos avanzando a pasos acelerados de manera muy significativa y en nuestro objetivo número cuatro, en nuestro Plan de Refundación que son las habilidades digitales, donde hablamos de la construcción de un modelo de la Educación Rural, y acompañados de la Fundación Ceibal siendo los mejores del mundo para tema de conectividad y el uso de plataformas de los sistemas educativos, teniendo el acompañamiento y logrando algunas experiencias de éxito”, mencionó el Secretario de Educación Profesor Daniel Esponda.
Uno de los ejes fundamentales es promover a los estudiantes como actores centrales de las experiencias de enseñanza y aprendizaje, con propuestas de prácticas participativas en la producción de recursos y proyectos educativos.
“Esto se puede escalar a otras comunidades de Honduras y también a comunidades urbanas y que justamente el valor radica en que es un proyecto muy pragmático, considerando los recursos y herramientas que ya existen en las comunidades, por lo que no se requiere de una alta inversión y es hacer el uso de manera inteligente de lo que ya está en esa zona, con una fuerte implementación pedagógica con el acompañamiento a los padres y docentes, teniendo mucha recepción por parte de la Secretaría de Educación”, mencionó la Directora de Fundación Ceibal Florencia Ripani.
Las cuatro comunidades educativas rurales participantes en la implementación del prototipo fueron la Escuela 10 de Septiembre de la aldea Las Hortensias, municipio de Yamaranguila, departamento de Intibucá; Escuela Cristóbal Colón, aldea El Camalotal, municipios Alauca, departamento de El Paraíso, Escuela Francisco Morazán, aldea La Florida municipio de Catacamas, departamento de Olancho; y CEB Unión Centroamericana, aldea Nueva Unión Centroamericana, municipio de Yamaranguila, departamento de Intibucá.
