Olancho, Honduras
El director de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), Eduardo Turcios Andrade, desmintió los rumores difundidos en medios nacionales sobre la mutilación del corazón de un hombre asesinado el pasado fin de semana en Olancho.
Turcios Andrade aclaró que la víctima, José Dagoberto Ramírez Flores, fue atacada en la aldea Río Negro, municipio de Campamento, recibiendo un disparo de escopeta en el tórax, según los resultados del reconocimiento de Medicina Legal.
“Podemos afirmar que la causa de muerte fue el impacto de la escopeta, no hubo intención de extraerle el corazón como se había sugerido inicialmente”, explicó el oficial.
Asimismo, señaló que las investigaciones apuntan hacia motivos pasionales como posible móvil del crimen, y que ya se tiene identificado al presunto responsable.
En cuanto al proceso de levantamiento del cuerpo, Turcios Andrade informó que inicialmente se enfrentaron a la oposición de los familiares para practicar la autopsia, por lo que se llevó a cabo en El Paraíso.
Sin embargo, luego de dialogar con los allegados, se logró consenso para trasladar el cuerpo a la morgue de la capital y realizar la autopsia forense correspondiente.
