Anahí Elizabeth Vásquez, originaria de Intibucá, falleció el domingo 17 de agosto en un hospital de San Antonio, Texas, una semana después de haber recibido varios disparos presuntamente a manos de su pareja, Wilfredo López.
El ataque ocurrió el pasado 10 de agosto en un complejo de apartamentos ubicado en el área de West Side. El tiroteo también dejó a otra mujer herida y provocó la muerte del hijo del agresor, Darwin López, de 22 años. Hasta el momento se desconoce el estado de salud de la otra víctima que sobrevivió al ataque.
Investigación y detención del sospechoso
Tras el hecho, López fue detenido por las autoridades texanas y enfrenta cargos por asesinato y agresión agravada con arma mortal. La fianza fue fijada en 850,000 dólares, aunque la fiscalía advirtió que los cargos podrían ampliarse tras confirmarse el deceso de Vásquez.
El historial delictivo del hondureño refleja múltiples detenciones en Estados Unidos: en 2009 por presunta agresión, en 2012 por conducir bajo los efectos del alcohol y en 2015 por reingreso ilegal. En cada ocasión fue deportado a Honduras, pero volvió a ingresar de manera irregular.
Clamor de justicia y repatriación
Familiares y allegados de Anahí lamentaron profundamente su muerte y solicitaron apoyo de las autoridades hondureñas para repatriar su cuerpo a Intibucá.
“Que se haga justicia, fueron dos personas a las que les quitó la vida”, expresó uno de sus cercanos, recordando además que otra mujer aún lucha por sobrevivir al ataque.
