Inglaterra – Virginia McCullough, originaria de Inglaterra, vivía junto a sus padres en lo que parecía una vida tranquila.
Sin embargo, en 2019, todo cambió cuando la mujer, por razones aún no del todo claras, decidió quitarles la vida a ambos progenitores y ocultar sus cuerpos dentro de su hogar.
McCullough no solo cometió el parricidio, sino que también conservó los cadáveres durante un largo periodo de tiempo.
A fin de evitar sospechas, utilizó la tarjeta de crédito de su padre para adquirir bolsas y guantes con los que escondió los cuerpos.
Además, imitaba la voz de sus padres en llamadas y otros contextos para dar la impresión de que seguían con vida.
El engaño de Virginia duró varios años, pero su conciencia no soportó más. Finalmente, en 2023, decidió confesar el crimen a la policía.
Según relató a los oficiales que acudieron a su domicilio, había asesinado a su padre, John, y a su madre, Lois, de 70 y 71 años respectivamente.
Cuando los agentes le pidieron más detalles, McCullough les llevó hasta el piso superior de la vivienda y reveló que los cuerpos estaban ocultos entre armarios y detrás de la cama.
Los restos de las víctimas habían estado allí durante todo ese tiempo.
Al ser detenida, McCullough no mostró signos de arrepentimiento, afirmando: “Siempre supe que este día llegaría eventualmente”.
En 2024, fue condenada a 36 años de prisión por el brutal asesinato de sus padres, cerrando así un caso que conmocionó a la comunidad.
Este escalofriante crimen ha dejado muchas preguntas sobre los motivos que llevaron a McCullough a tomar tan drástica decisión y cómo fue capaz de ocultar los cuerpos por tanto tiempo sin levantar sospechas.
