París.- Los Juegos Olímpicos siguen rodeados de polémicas, esta vez por Angela Carini, quien llegaba con altas expectativas y terminó llorando.
La boxeadora ha enfrentado un inesperado revés en su carrera.
Carini de origen italiano se vio obligada a retirarse del combate en tan solo 45 segundos, tras recibir dos potentes derechazos de la boxeadora transgénero Imane Khelif, originaria de Argelia.
La derrota fue especialmente dolorosa para Carini, quien ha enviado un emotivo mensaje a su padre expresando su tristeza y decepción tras el desafortunado desenlace del enfrentamiento.
“Solo quería dedicarle esta victoria a mi padre”.
En sus declaraciones, rememoró cómo, antes de los Juegos Olímpicos de Tokio, le había prometido a su padre que no se rendiría a pesar del agotamiento físico y mental que experimentaba.
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Carini relató que su padre le había inspirado con una analogía sobre el ciclismo: “Cuando llega el último kilómetro, los ciclistas pedalean más fuerte”.
Pero ese sueño le resultó imposible, por que aunque se preparó para luchar con todo, nunca esperó que su contrincante fuera transgénero.
Y es que en este tipo de competencias no se trata de discriminación, se trata de realidades biológicas, pues la realidad es que físicamente la fuerza de alguien que nació varón siempre será mayor de alguien biológicamente mujer.
Así que; entre lágrimas dijo que recibió el golpe más fuerte que había sentido en su vida de boxeadora, y añadió que no le parecía justo.
