Estados Unidos
El gobierno de la ciudad de Baltimore ha interpuesto una demanda contra el propietario y el administrador del buque de carga Dali, responsables del accidente que resultó en el colapso del puente Francis Scott Key y causó seis muertes, así como pérdidas millonarias, según informes de medios estadounidenses este martes.
Las denuncias fueron presentadas el lunes contra las compañías propietarias Grace Ocean Private Limited y la administradora Synergy Marine PTE LTD, ambas con sede en Singapur y que buscan una responsabilidad limitada, según varios medios.
Los abogados de la alcaldía de Baltimore acusan a ambas compañías de proporcionar al barco una tripulación incompetente, carente de las habilidades y capacitación adecuadas, según reporta CNN.
Se están exigiendo daños y perjuicios no especificados a ambas empresas por el accidente del Dali, un barco que transportaba miles de contenedores de carga y que en la noche del 26 de marzo golpeó contra el puente, causando su colapso poco después.
A principios de abril, los abogados de las compañías afirmaron en un expediente judicial que el accidente no fue resultado de ninguna culpa, negligencia o falta de atención por parte de las empresas.
Sin embargo, los abogados del alcalde Brandon M. Scott y del Concejo Municipal de Baltimore rechazaron estos argumentos el lunes y afirmaron que las empresas deberían ser consideradas responsables de cualquier daño que se pueda determinar tras un juicio.
La denuncia llega después de que el FBI anunciara el pasado 15 de abril la apertura de una investigación criminal para esclarecer lo sucedido.
La semana pasada, la Guardia Costera de Estados Unidos habilitó un tercer canal temporal alternativo en el río Patapsco que proporcionará acceso limitado al puerto de Baltimore para embarcaciones comerciales, mientras se continúa la limpieza de los escombros del colapsado puente.
El capitán de la Guardia Costera de EE.UU., David O’Connell, declaró que se espera que el canal, llamado Fort Carroll, ayude a restaurar aproximadamente el 15% de la actividad comercial previa al accidente.
El accidente resultó en la muerte de seis personas, todas trabajadores latinoamericanos que se encontraban realizando tareas de parchado del asfalto en el momento del suceso. Hasta ahora, solo se han encontrado los cuerpos de cuatro de ellos.
